DISFUNCION ERECTIL Ó IMPOTENCIA

Dr. RAMÓN BONILLA PARRILLA

URÓLOGO DE POLICLÍNICA LACIBIS

Doctor en Medicina y Cirugía.

Especialista en Urología y Andrología.

Fellow European Board of Urology (FEBU).

Fellow of the European Committee of Sexual Medicine.

La disfunción eréctil, o impotencia como se conoce de forma coloquial es un problema muy frecuente,  que afecta aproximadamente al 20% de los varones (1 de cada 5).

La disfunción eréctil puede ser una señal de alarma de enfermedades del corazón, ya que comparten muchos factores de riesgos en común: tabaco, la diabetes, la hipertensión arterial, valores elevados de colesterol, etc.

El problema puede presentarse a cualquier edad, aunque es más frecuente a partir de los 40 años.

Es un problema que afecta a todas las esferas de la vida, tanto personal, a la pareja e incluso a las relaciones profesionales.

¿Qué es la disfunción eréctil?

La disfunción eréctil es la incapacidad para mantener la erección lo suficientemente rígida para permitir una relación sexual satisfactoria.

¿Es muy común la disfunción eréctil?

Todos los hombres pueden tener problemas para alcanzar la erección en algún momento de sus vidas, especialmente cuando están cansados, sufren estrés, están bajo los efectos del alcohol o padecen una enfermedad grave.

En nuestro país, el 19% de los hombres entre 25 y 70 años presentan problemas para la erección. Esto supone que más de dos millones de españoles presentan impotencia, por lo que es un trastorno muy frecuente y no deben tener miedo o vergüenza en acudir a su médico y consultar este problema.

Los varones con diabetes, hipertensión, fumadores, etc, padecen con frecuencia problemas de erección.

¿La disfunción eréctil puede ser reflejo de alguna enfermedad importante?

Existen factores de riesgo como el tabaco (incluso para los ex fumadores), la diabetes, la hipertensión arterial o el aumento del colesterol que producen lesiones progresivas en todas las arterias del cuerpo. Las arterias del pene tienen menos diámetro que las arterias coronarias que irrigan al corazón y muchas veces se obstruyen inicialmente.

Múltiples trabajos han demostrado que los pacientes con riesgo vascular pueden desarrollar inicialmente una disfunción eréctil. Si estos factores de riesgo no se corrigen, la enfermedad vascular avanza y puede producirse un infarto de miocardio y enfermedades vasculares en el cerebro, en el corazón y en todas las arterias del organismo.

En este sentido es muy importante saber que la disfunción eréctil puede ser una “señal de alarma” que nos avisa que las arterias se están cerrando. Cuando un paciente presenta disfunción eréctil debe consultar para prevenir enfermedades del corazón.

¿Qué estudios se realizan para diagnosticar?

Un urólogo experto en medicina sexual puede diagnosticar y tratar una disfunción eréctil. El diagnóstico y el tratamiento deben ser individualizados, es decir, personalizados para cada paciente. Es muy importante que el paciente acuda con su pareja.

Una buena historia clínica (entrevista) es la piedra angular del diagnóstico. Esta buena historia clínica junto con la exploración física adecuada nos indica el tipo de impotencia y las posibles causas.

Además nos permite valorar la repercusión psicológica que la impotencia produce sobre el paciente y su pareja.

La entrevista con el paciente debe realizarse en un ambiente relajado, sin prisas, y es muy importante analizar las expectativas y motivaciones.

A partir de su historia clínica un urólogo puede solicitar la analítica sanguínea más adecuada para cada paciente. Si la disfunción se acompaña de un descenso del deseo sexual es obligatorio realizar una determinación hormonal completa, tanto de la testosterona total y otras hormonas implicadas (prolactina, hormonas tiroideas, etc.).

En Policlínica Lacibis esta evaluación básica (historia, exploración y analítica) nos permite orientar al paciente de la causa de su problema y recomendarle el tratamiento más adecuado.

 

¿Qué tratamientos podemos ofrecer?

Actualmente existen distintas múltiples opciones terapéuticas. El tratamiento debe ser personalizado y es fundamental la colaboración de la pareja. Las soluciones y los resultados son mejores cuando se conoce la causa y es posible actuar sobre ella.

En pacientes con problemas de origen psicológico es fundamental una orientación psicológica tanto con el paciente como con su pareja para ayudarles a superar la situación. Es muy importante tranquilizarlos y disminuir la tensión en la relación de pareja. Si existe una depresión o un problema psicológico acusado puede ser necesario un tratamiento médico.

En los pacientes con una causa hormonal, habitualmente un déficit de testosterona, es preciso un tratamiento sustitutivo con esta hormona, que se puede administrar en forma de un gel de administración diaria o de una inyección cada 10-12 semanas

En los pacientes con factores de riesgo cardiovascular (hipertensión, colesterol, tabaco, diabetes, etc.) deben corregirse estos factores para evitar que desarrollen una enfermedad cardiovascular grave (infarto de miocardio, angina de pecho, arterioesclerosis, etc.). La corrección de estos factores mejora los problemas de erección.

Debe plantearse a cada paciente el tratamiento más apropiado a sus problemas, empezando inicialmente por los tratamientos más sencillos.

Los tratamientos actuales para la disfunción eréctil orgánica son:

  • Fármacos orales (sildenafilo, tadalafilo, vardenafilo y avanafilo)

Alprostadilo, ya sea en crema que se administra sobre la uretra o dentro de la uretra, o en forma de inyecciones en el pene (autoadministrada por el mismo paciente con una aguja muy fina, similar a la de insulina).

  • Ondas de choque en el pene.
  • Dispositivos de vacio
  • Implantes de prótesis de pene

En la consulta de Policlínica Lacibis, tras un diagnóstico adecuado, explicamos al paciente todas las opciones que existen y, de acuerdo a la opinión y preferencias del paciente y de su pareja, planteamos el tratamiento más adecuado.